Hace pocos días salía a la luz la alerta sobre la posible toxicidad de unas nuevas mascarillas con Grafeno. Todo comenzó con el Gobierno de Canadá debido a que las partículas de Grafeno podrían causar toxicidad pulmonar. Hoy intentaremos arrojar algo más de luz sobre el tema.

¿Qué es el grafeno?

El grafeno es un material que comenzó a popularizarse hace unos años a pesar de que su descubrimiento fue en 2004. Su popularización se debe a que ofrece una gran resistencia y elasticidad con muy poco peso, así que se comenzó a utilizar en todo tipo de productos para mejorar su durabilidad y resistencia.

Se trata de un compuesto formado por átomos de carbono que se agrupan formando láminas en una estructura de panal de abejas, con lo que podrás imaginar la resistencia y flexibilidad en función de donde se aplique. Según algunos estudios es incluso más resistente que el diamante y, además, ofrece una gran conductividad térmica y eléctrica.

Podemos encontrarlo en teléfonos móviles, lápices, equipos electrónicos e incluso en prendas de ropa técnica como zapatillas, equipaciones de ciclismo y otras prendas que necesitan una resistencia extra, incluso en chalecos antibalas en combinación o sustitución del popular Keblar.

¿Por qué se usa en algunas mascarillas?

El grafeno también tiene capacidades para evitar la proliferación de microorganismos como bacterias, virus y hongos, de modo que a algunos fabricantes se les ocurrió incorporarlo a las mascarillas para mejorar su capacidad de protección contra el COVID, sin pensar en los posibles efectos secundarios.

¿Por qué es peligroso en las mascarillas?

Aunque aún no hay estudios que corroboren que su uso en mascarillas es perjudicial, si existen otros de consecuencias en el sistema respiratorio por inhalación de este material en concentraciones altas. No olvidemos que hablamos de láminas de carbono que pudieran llegar a entrar en los pulmones.

Estos estudios hablan de respirarlo en grandes concentraciones y durante tiempos prolongados para que llegue a producir inflamaciones pulmonares, pero no de las cantidades inhaladas mediante su uso en mascarillas. Aún así, ante la más mínima sospecha de las mascarillas con grafeno pudieran desprender partículas que llegaran a causar este efecto de inflamación pulmonar, es preferible evitarlas mientras no existan estudios que las declaren 100% seguras.

¿Mi mascarilla tiene grafeno?

Es muy poco probable, no debes asustarte. Ten en cuenta que se trata de uno de los materiales más caros del mundo y las mascarillas que se utilizan normalmente solo cuestan unos céntimos.

Recuerda que ante la duda siempre es preferible acudir a profesionales, así que te esperamos en la farmacia para cualquier consulta que tengas.